24 de diciembre
"HUMILDE Y SIN EMBARGO EXTRAORDINARIA"
Seguramente el nacimiento humano de Cristo fue tanto humilde como extraordinario. ¿Por qué humilde? porque como hombre, Cristo ha nacido de una criatura humana. ¿Por qué extraordinario? porque ha nacido de una virgen. ¡Concibió virgen, parió virgen, permaneció virgen! (Del Credo 3, 6)
ORACIÓN: Venid, adoremos a aquél a quien la virgen concibió sin pecado. (Sermones 231, 2)