15 de abril
"CRISTO MURIÓ PARA QUE TU VIVAS"
Por ti, Cristo aceptó ser crucificado, para enseñarte la humildad. El estaba vivo y tu estabas muerto. El murió para tu vivas. Dios venció a la muerte para que tu vivas. Dios venció a la muerte para que la muerte no pudiera vencer a los seres humanos. (Comentario al Evangelio de S. Juan 2, 4; 14, 13)
ORACIÓN: ¿Dónde está, muerte tu victoria? ¿Dónde está, muerte, tu aguijón? Señor, tu has sido golpeado, herido y humillado; pero has sido herido por mi, tu que me has formado. Muerte, oh muerte, aquél que me ha hecho ha sido herido por mi y con su muerte él te ha vencido. (Sermones 128, 10)
No hay comentarios:
Publicar un comentario